THRIVING: MAKING CITIES GREEN, RESILIENT, AND INCLUSIVE IN A CHANGING CLIMATE – BANCO MUNDIAL

0
(0)

THRIVING: MAKING CITIES GREEN, RESILIENT, AND INCLUSIVE IN A CHANGING CLIMATE – BANCO MUNDIAL[1]

Por: Javier Gustavo Pérez Mendieta – Unidad de Investigación y Políticas Municipales

Es innegable que las ciudades se han convertido en un asunto de interés de primer orden, particularmente por la población que concentran, pero además por sus repercusiones, positivas y negativas, en diversos sentidos. Los gases de efecto invernadero, generados en su mayor parte en las ciudades, están incrementando la frecuencia e intensidad de los desastres de diferente tipo, debido al cambio climático. Esta relación entre el desarrollo de las ciudades y el clima cambiante es analizada en el documento “THRIVING: Making Cities Green, Resilient, and Inclusive in a Changing Climate” publicado por el Banco Mundial en 2023.

Este informe contiene un diagnóstico amplio y pormenorizado de las ciudades a nivel mundial, diseñando una tipología para su estudio, un análisis de sus crecientes amenazas, una descripción de los fenómenos naturales que se vieron incrementados como efecto del cambio climático, pero además una guía práctica para autoridades y asesores en la intención de aminorar los efectos del cambio climático en la práctica. Con la utilización de fuentes secundarias, se procesa la información de 10.000 ciudades, lo que permite obtener generalizaciones importantes, pero también recomendaciones a medida.

Luego de una descripción general y una introducción que resumen los hallazgos, el documento se divide en tres partes: la primera “¿Dónde estamos ahora?, la segunda ¿Qué sabemos?, y la tercera ¿Cómo lo hacemos? La primera parte apunta a desarrollar un diagnóstico global del estado de situación y la metodología de clasificación de las ciudades objeto de estudio. La segunda parte muestra la relación de afectación entre el cambio climático y las ciudades, es decir, cuánto afecta el cambio climático a las ciudades y cuánto las ciudades afectan al clima. Finalmente, la tercera parte aborda las acciones y políticas sugeridas para hacer las ciudades más verdes, más resilientes y más inclusivas, como mecanismo para paliar los daños sobre el medio ambiente.

Antes de revisar el contenido del documento, es prudente mencionar el objetivo del mismo, pues el Banco Mundial, con esta publicación, pretende llamar la atención para tratar un tema de lo más urgente, pero normalmente ignorado. En este marco, en la introducción se describe un estado de situación general, pero por sobre todo destaca su propuesta de cambio. Los principales mensajes son los siguientes:

  • La población que vive en las ciudades pasó de 1,19 billones a 4,46 billones, entre 1970 y 2021 y de manera coincidente la temperatura promedio subió 1.19° C por encima del nivel pre industrial. 
  • Los eventos climáticos extremos incrementaron en su frecuencia e intensidad, afectando crecientemente a las ciudades. Las ciudades costeras ven incrementado el riesgo de inundación debido al incremento de 0.125 milímetros por año en el nivel del mar.

El Banco Mundial llama la atención sobre este tema pues, a pesar de su creciente afectación, es ignorado. Es así que, en 2021, el Banco Mundial ha lanzado su estrategia GRID (green, resilient, and inclusive development) como respuesta a los desafíos que representa el cambio climático.

Capítulo 1

La Introducción del primer capítulo da cuenta de manera muy amplia del razonamiento por detrás del documento y, en particular, sobre esta compleja relación entre el crecimiento urbano y el cambio climático. Este escenario se resume en el documento de la siguiente manera[2]:

“El crecimiento de una ciudad también puede dar lugar a una amplia variedad de tensiones. Estas tensiones, conocidas como fuerzas de congestión, efectos de hacinamiento y deseconomías de aglomeración, surgen de la presión de la población de una ciudad sobre sus suministros de tierra, vivienda y servicios básicos; stock de infraestructura; y medio ambiente.

Si no se manejan bien, estas tensiones pueden amenazar no solo la productividad y el crecimiento de una ciudad, sino también la calidad y, por lo tanto, la sostenibilidad de ese crecimiento, haciendo que la ciudad sea menos verde, menos resiliente y menos inclusiva. Los resultados de estas tensiones son evidentes en los barrios marginales y la expansión, la falta de acceso a los servicios básicos, las calles paralizadas, la asfixiante contaminación del aire y la contaminación de las fuentes de agua que caracterizan a muchas ciudades en países de ingresos bajos y medios en la actualidad.

Al pensar en estas tensiones, los economistas han asumido tradicionalmente que el clima de una ciudad es fijo o cambia muy lentamente. Sin embargo, el cambio climático ha hecho que esta suposición sea cada vez más insostenible. Ha surgido como una fuente adicional y creciente de estrés en muchas ciudades, ya que se suma a muchas de las fuentes de estrés tradicionalmente enfatizadas e interactúa con ellas, lo que influye aún más en la calidad del crecimiento de una ciudad. También se ha reconocido claramente que la naturaleza del desarrollo espacial de una ciudad tiene el potencial de afectar no solo el clima global a través de su contribución a las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), sino también su propio clima local a través del efecto isla de calor urbano”.

Este capítulo continúa con una descripción global de ¿cuán verdes?, ¿cuán resilientes? y ¿cuán inclusivas son las ciudades? En todos los casos, se analiza la información secundaria recopilada de 10.000 ciudades alrededor del mundo y en todos los continentes, procurando captar las diferencias más importantes entre ellas[3]. Al final de este capítulo se muestra su tipología.

Para establecer cuán verdes son las ciudades se analizan tres factores: las emisiones de dióxido de carbono, las emisiones de material particulado de 2,5 micras o menos de diámetro y el promedio de los niveles de vegetación[4]. Con base en esta información se desarrollan las siguientes conclusiones:

  • Las áreas urbanas son islas de calor, pues son más calientes que los territorios aledaños. Los edificios y superficies pavimentadas tienen una alta inercia termal absorbiendo el calor durante el día y soltándolo durante la noche, además de obstruir los flujos de aire.
  • Las ciudades concentran la mayor parte de las emisiones de dióxido de carbono, representando un 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero antropogénicas a nivel global.
  • El promedio de emisiones per cápita incrementa junto con el desarrollo de las ciudades, es decir, a más desarrollo más emisiones. Sin embargo, las ciudades de países de ingreso alto tienen emisiones per cápita menores que las ciudades de ingresos medio altos.
  • Las ciudades de países de ingreso medio altos del Este de Asia concentran una mayor emisión a nivel global. En general, las ciudades de países de ingresos medio altos contribuyen con cerca de 55% de las emisiones totales.
  • Las ciudades de países de ingresos altos producen la mayoría de emisiones globales en los sectores residencial y de transportes en términos absolutos y relativos.
  • Las ciudades más compactas, controlando por el tamaño de la ciudad y nivel de desarrollo, tienen niveles más bajos de emisiones en los sectores residencial y de transporte.
  • Las ciudades más grandes y de mayor desarrollo concentran la mayor parte de las emisiones.
  • Las ciudades más grandes y menos compactas tienen una mayor polución. La polución incrementa con el desarrollo de las ciudades, pero decrementa en las ciudades de países con ingreso alto, a niveles incluso más bajos que en ciudades de ingreso bajo. La información muestra que, en los países de mayor ingreso, se tendría mayor capacidad de monitorear la polución y regular el uso de tecnologías más limpias.
  • Las ciudades con mayor población tienen menores niveles de vegetación.
  • La vegetación promedio desciende cuando incrementa el desarrollo, pero asciende en ciudades con niveles altos de ingreso. 

La resiliencia de las ciudades, medida como la capacidad de una ciudad para volver a un punto inicial luego de sufrir un evento adverso asociado al cambio climático, fue evaluada en la muestra de ciudades con resultados que varían de acuerdo al tamaño, el nivel de desarrollo y la línea de base de las ciudades. La información permite concluir lo siguiente:

  • A largo plazo, las ciudades tienden a recuperar su vitalidad económica y su población, incluso luego de eventos devastadores. Más aún, la reconstrucción puede representar una oportunidad para construir nuevamente, pero de mejor manera.
  • En el corto y mediano plazos, los impactos de los eventos adversos pueden ser muy significativos y en ciertos casos devastadores para los hogares.
  • Las ciudades pequeñas y grandes de los países de ingresos bajos y medio bajos son afectadas en mayor medida que las ciudades ingresos medio altos y altos. Junto con ello, la resiliencia de las ciudades de ingresos medio altos y altos es mayor.
  • De manera particular, en el caso de las ciudades con ingresos bajos y medio bajos, la línea de base climática importa. Un ejemplo es el de las ciudades en Haití que son constantemente afectadas por eventos adversos que junto a conflictos de diverso carácter que hacen que su recuperación sea altamente compleja.

En el reporte, la inclusión es medida con la información disponible sobre pobreza, acceso a servicios básicos, violencia doméstica, como un indicador de la falta de inclusión de género, inequidad del ingreso de los hogares e indicadores de salud. El análisis de la información permite obtener las siguientes conclusiones:

  • Las ciudades más grandes y de mayor desarrollo tienen tasas de pobreza más bajas. Esta conclusión es consistente con la tendencia de estas áreas de proveer más empleos formales y mejor pagados.
  • Residentes de las ciudades, en relación a los de los suburbios, tienden a tener un mayor acceso a servicios básicos y mejores indicadores de salud.
  • Las ciudades tienden a tener menores índices de violencia doméstica.
  • El porcentaje de mujeres que creen que la violencia física se justifica, por al menos alguna razón, es más baja en las ciudades que en los suburbios y más baja en éstos que en áreas rurales.
  • Las ciudades más grandes, especialmente en países de ingreso bajo, tienden a tener una mayor inequidad del ingreso de los hogares. En ciudades de países de ingresos bajos y medio bajos, la inequidad del ingreso incrementa según la ciudad crece.
  • Los residentes de las ciudades grandes sufren más de enfermedades asociadas con estilos de vida modernos.
  • Un hallazgo que no es propiamente de inclusión, pero que resulta importante, es que los niveles de cohesión social, relacionados con propósitos comunes, confianza o cooperación, son mayores en las áreas rurales que en las áreas urbanas.

Capítulo 2

El Capítulo 2, “Una tipología global de ciudades”, desarrolla una tipología de las ciudades, que será utilizada a lo largo del documento con fines comparativos, basada en dos variables: el tamaño de las ciudades en términos de población y el nivel de desarrollo que se fundamenta en el ingreso per cápita. De esta manera, se cuenta con ciudades pequeñas, medianas y grandes de acuerdo al tamaño, y ciudades de ingreso bajo, medio y alto. En base a esta tipología se desarrolla nueve tipos de ciudades.

  • Ciudades de ingresos bajos: pequeñas, medianas y grandes
  • Ciudades de ingresos medios: pequeñas, medianas y grandes
  • Ciudades de ingresos altos: pequeñas, medianas y grandes

Esta tipología permite distinguir la diferencia entre vegetación, resiliencia e inclusión entre diferentes tipos de ciudades, pero más aún permite conocer la combinación y gravedad de las amenazas relacionadas con el cambio climático en diferentes tipos de ciudades. En este sentido, las ciudades se enfrentarán a diferentes desafíos o al menos a intensidades diferentes según el tipo de ciudad que sean. Como resultado de la aplicación de la metodología, el estudio determina el nivel de gravedad[5] de cada desafío relacionado con el cambio climático según el tipo de ciudad y la lista de desafíos identificados como severos y moderados en cada caso. El cuadro siguiente resume los resultados:

Tabla 1. Gravedad de los desafíos en la tipología global, por tamaño de ciudad y grupo de país según ingreso

Fuente: Banco Mundial (2023)

Se puede concluir con base en esta información que:

  • Las ciudades pequeñas y medianas de países de ingresos bajos tienen como desafíos más importantes la pobreza y acceso a servicios básicos.
  • Las grandes ciudades en países de bajos ingresos enfrentan severos desafíos en reducción de la polución, fortalecimiento de la resiliencia y mejora en el acceso a servicios básicos.
  • Las ciudades pequeñas en países de ingreso medio experimentan inequidad, mientras que la pobreza persiste.
  • Las ciudades medianas y grandes en países de ingresos medios enfrentan severos desafíos en vegetación.
  • Las ciudades grandes en países de ingresos medios son las más inequitativas entre todos los tipos de ciudades, seguidas por las medianas de los mismos países.
  • Las ciudades pequeñas y medianas en países de ingresos altos enfrentan desafíos moderados en emisiones de dióxido de carbono, resiliencia e inequidad.
  • Las ciudades medianas de países de ingresos altos son económicamente menos resilientes a eventos climatológicos que las ciudades grandes de los mismos países.
  • Las ciudades grandes de países de ingresos altos enfrentan una grave inequidad y emisiones persistentemente altas.

Un siguiente apartado dentro de este mismo capítulo puntualiza cómo las amenazas del cambio climático varían entre ciudades. Como resultado del análisis de la información se concluye que: 

  • Las ciudades de los países de ingresos bajos se encuentran más expuestas que otras a las amenazas relacionadas con el cambio climático.
  • Las ciudades más grandes se encuentran más expuestas a las amenazas del cambio climático.
  • Las ciudades de ingresos medios y altos enfrentan altos niveles de exposición a la amenaza de estrés hídrico a medida que crecen en población.

Esta parte, también, realiza un estudio de caso denominado “Exclusión multidimensional y exposición a la contaminación atmosférica en ciudades peruanas” que aplica la metodología y concluye en perfiles de exclusión multidimensional.

La Parte 2 del reporte se denomina “¿Qué Sabemos?” y se divide en dos capítulos enfocados en comprender la relación bidireccional entre el cambio climático y las ciudades. Es decir, cómo y cuánto afecta el cambio climático directamente a las ciudades y sus alrededores, y cómo las ciudades pueden afectar el clima y el medio ambiente, provocando la exacerbación de los efectos del cambio climático.

Capítulo 3

El Capítulo 3 “los impactos del cambio climático y ambiental en las ciudades” se divide en dos preguntas concretas: cómo afecta directamente y cómo afecta indirectamente el cambio climático a las ciudades. En principio se realiza una clasificación de los eventos adversos climáticos entre los repentinos y los de evolución lenta:

Clasificación de eventos adversos

Eventos repentinosEventos de evolución lenta
Olas de calor – Calor extremoSequía
Olas de frío – Frío extremoPolución
Fuertes precipitaciones e inundacionesDegradación de la tierra
Inundación costeraIncremento del nivel del mar
Incendios forestales 
Huracanes, ciclones y tifones 

Fuente: Banco Mundial (2023)

La afectación directa a las ciudades, según la tipología descrita y los diferentes eventos adversos, presenta las siguientes conclusiones:

  • Los eventos adversos no ocurren aisladamente, sino que, a menudo, interactúan o se intensifican con otros. Por ejemplo, los ciclones y olas de calor ocurren conjuntamente añadiendo complejidad en sus efectos.
  • Los riesgos del cambio climático interactúan con la intensa búsqueda de tierras en áreas urbanas. Debido a que los precios son reflejo de los riesgos, la población más pobre vive en sectores más peligrosos.
  • Los impactos del clima tienen importantes consecuencias fiscales para los gobiernos locales, debido a los crecientes gastos y la reducción de ingresos en situaciones de emergencia.
  • El cambio climático, a futuro, puede hacer que muchas de las ciudades del mundo sean insostenibles o incluso inhabitables.
  • “El riesgo moral, un término que se aplica a la participación en un comportamiento imprudente porque uno no tiene que asumir el costo total de ese comportamiento, es ampliamente aceptado como una de las principales causas de la crisis financiera mundial de 2008”.

La afectación indirecta del cambio climático hacia las ciudades tendría las siguientes características:

  • Los eventos adversos en las áreas rurales, como las sequías, llevan a una más rápida urbanización, debido a la migración campo ciudad.
  • La migración campo ciudad inducida por el cambio climático está asociada con un crecimiento urbano disperso debido a los asentamientos en áreas periféricas.
  • El estrés hídrico también afecta a las ciudades por la distancia entre ellas y las fuentes de agua y la necesidad de que la infraestructura deba recorrer muchos kilómetros.
  • El cambio climático influye en el aumento de los precios de la comida en zonas urbanas, afectando particularmente a los sectores más pobres.

El reporte, además de considerar diferencias en el tamaño y desarrollo de las ciudades, también se cuestiona sobre la afectación de los eventos adversos por el cambio climático a diferentes poblaciones:

  • La población pobre no está universalmente más expuesta a los riesgos climáticos. En ciertos casos, el riesgo de un desastre es igual para población rica o pobre, por ejemplo, en el caso de terremotos.
  • La selección del lugar dónde vivir en lugares muy expuestos a riesgos climáticos por parte de poblaciones pobres tiene su origen en la preferencia por un acceso cercano a fuentes de trabajo y servicios, las restricciones financieras de las familias o asimetrías de información en dicha selección.
  • La población pobre es la más golpeada por los desastres. La afectación de la población pobre es mayor en términos relativos luego de un desastre.
  • La evidencia muestra que la afectación de algunos grupos es mayor que en otros, como por ejemplo las mujeres y la población con menor formación.
  • Algunas condiciones climáticas afectan en mayor medida a cierto tipo de trabajadores más que a otros. Los trabajadores que desarrollan funciones en exteriores puede estar más expuestos a condiciones como el calor, la lluvia o el frío, afectando en mayor medida su desempeño y tiempo de trabajo.
  • La escasez de agua tiene un impacto mayor en grupos vulnerables, debido fundamentalmente a la escasa cobertura de agua potable por cañería en ciertos sectores y el alto costo de otro tipo de abastecimiento.
  • El cambio climático tiene mayores efectos negativos en poblaciones ya vulnerables, generando incluso condiciones para la violencia de género, debido a la vulnerabilidad en la que se encuentran las mujeres en su búsqueda por agua potable al tener que recorrer grandes distancias en busca de abastecerse.
  • Los eventos adversos relacionados con el cambio climático especialmente, en interacción con problemas relacionados con el crecimiento urbano, podrían ralentizar o detener la escalera para escapar de la pobreza.

Capítulo 4

El Capítulo 4 “El impacto de las ciudades en el clima y el medio ambiente” evalúa cómo las ciudades afectan el clima y el medio ambiente a través del diseño urbano y las inversiones. Además de los impactos negativos en varias ciudades, también las ciudades tendrían beneficios ambientales, por ejemplo, la densificación, que está asociada con un menor uso de vehículos y menores niveles de consumo de energía.

El apartado “Panqueques o Pirámides – ¿Cómo evolucionan en su forma las ciudades?” evalúa de qué manera las ciudades, en particular su diseño, pueden afectar a su medio ambiente, positiva y negativamente. En este sentido, se alcanzan las siguientes consideraciones:

  • Las ciudades modernas pueden desarrollar a través de 3 márgenes: expansión horizontal, desarrollo al interior[6] o desarrollo vertical. La expansión horizontal se manifiesta por un crecimiento de baja densidad, el desarrollo al interior se refiere a las adiciones al interior de áreas ya construidas y el desarrollo vertical consiste en la construcción de propiedades comerciales o residenciales más altas.   
  • A pesar de los costos menores en trasporte y construcción vertical, las ciudades en países de menor ingreso continúan expandiéndose horizontalmente. Este crecimiento representa la forma de panqueques. Las ciudades en países con mayores ingresos toman la forma de pirámides, privilegiando el crecimiento vertical.
  • Las ciudades más prósperas son más productivas, por lo que las construcciones altas, intensivas en capital se ven justificadas por un nivel de demanda suficiente para tales inversiones.
  • Las formas urbanas más compactas podrían salvar tierra fértil para la agricultura y reducir la polución.
  • El desarrollo vertical de las ciudades podría tener efecto en la inclusión mejorando el acceso a empleo, educación y servicios, y reduciendo los precios de la vivienda, cuando se considera una buena localización, diseño y se coordina los sistemas de transporte público.
  • A pesar de que las ciudades compactas, en cualquier nivel de desarrollo, tienden a tener un menor nivel de emisión de dióxido de carbono en los sectores residencial y transporte, los materiales de construcción de edificios de altura utilizan tecnología con alta emisión, que deberían compensarse con un menor flujo de emisiones a futuro.
  • A pesar de cierta incertidumbre, parece claro que el impacto neto del desarrollo vertical en el ambiente sería menor si es combinado con inversiones en transporte, fomentando el transporte a pie o en bicicleta.
  • El desarrollo vertical y el desarrollo al interior en ciudades de países de ingresos bajos y medios está limitado por mercados de suelo urbano disfuncionales, zonificación y regulaciones de construcción restrictivas.
  • Repensar las limitaciones podría conducir a ganancias de bienestar a favor de los pobres, especialmente en las ciudades más grandes. Algunos estudios muestran que, en un mundo completamente libre de restricciones sobre altura, el bienestar global sería un 1,5 % más alto y el bienestar de los trabajadores un 3,3 % más alto.
  • El diseño urbano y la diversificación del uso del suelo también son importantes para la transitabilidad, las “huellas de carbono” asociadas y el efecto de isla de calor urbano de las ciudades.

¿Qué papel juega el transporte (horizontal) en la configuración de las ciudades y sus impactos ambientales?

  • Las ciudades que dependen más de los automóviles y menos de los sistemas de transporte público son más extensas (dispersas).
  • Las inversiones en sistemas de transporte público pueden contribuir directamente a reducir la contaminación del aire, con importantes beneficios para la salud.
  • Los subterráneos (como en el caso de El Cairo) ayudan a reducir la contaminación del aire con beneficios sustanciales para la salud de las ciudades altamente contaminadas.
  • La eliminación de los subsidios a los combustibles puede ayudar a reducir la dependencia de los automóviles, con importantes beneficios para el medio ambiente y la salud.
  • Los sistemas de transporte masivo requieren una buena planificación y diseño para su éxito.

¿Cómo afectará la expansión urbana a las tierras agrícolas y la producción?

  • La urbanización está asociada con una demanda creciente y cambiante de alimentos. También conduce a cambios en el uso de la tierra que afectan la agricultura.
  • La mayor parte de la expansión urbana será hacia las tierras de cultivo, seguida de los bosques.
  • Además de fomentar un desarrollo más compacto, mejorar la productividad agrícola y reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos también puede compensar los impactos de la expansión urbana horizontal.
  • La mejora sostenible de la productividad agrícola requiere una innovación acelerada, en lugar de aumentar el uso de la tierra, el agua y otros insumos de producción. La innovación a través de la invención, adaptación y difusión de nuevas tecnologías adaptadas localmente será clave.

¿Cómo afectará el crecimiento urbano la competencia por el agua entre las ciudades y las tierras agrícolas?

  • Es probable que aumente la competencia entre las ciudades y la agricultura por el suministro de agua.
  • A medida que las ciudades crecen, a menudo invaden las áreas circundantes para satisfacer su sed.
  • Las ciudades también suelen utilizar las regiones circundantes como botaderos de residuos. Las tierras agrícolas aguas abajo de las ciudades a menudo dependen de las aguas residuales urbanas contaminadas para el riego.

La Parte 3 “¿Cómo lo hacemos?” contempla la guía o “brújula” como la denomina el mismo reporte, para que los decisores públicos tomen acciones relacionadas con el cambio climático en diferentes niveles.

Capítulo 5

El capítulo 5 se denomina “políticas para promover un desarrollo urbano verde, resiliente e inclusivo”.

¿Cuáles son las opciones?

Este apartado aborda las posibilidades para lograr un desarrollo más verde, más resiliente y más inclusivo. Con este objetivo, el reporte plantea las cinco I: Información, Incentivos, Seguros (Insurance), Integración e Inversiones.

Información 

La información ayuda a las personas y las empresas a comprender mejor y, por lo tanto, a adaptarse mejor a los riesgos climáticos, tanto en las ciudades como dentro de ellas. La información es crítica para la adaptación climática y es un bien público, lo que proporciona una sólida justificación para la provisión o el subsidio por parte del gobierno.

La difusión de información precisa sobre riesgos facilita una mejor toma de decisiones por parte de los hogares, las empresas y los gobiernos locales. Una mejor información sobre los mercados de tierras también podría contribuir a los esfuerzos de mitigación del cambio climático al reducir los costos de la construcción vertical, ayudando a promover formas urbanas más compactas.

Incentivos

Los incentivos pueden tener varias formas: impuestos, cargas, subsidios o permisos. Estos incentivos alentarán a las personas y las empresas a considerar los riesgos del cambio climático y a los funcionarios gubernamentales a abordar los desafíos de un desarrollo verde, resiliente e inclusivo.

Cualquiera que sea el incentivo, se debe prestar atención a la equidad porque, aunque las políticas de incentivos elevan el bienestar general, para cualquier política dada, algunas personas o empresas pueden ganar más que otras. Si no se tienen en cuenta los impactos distributivos de los nuevos incentivos y, en términos más generales, de cualquier política destinada a ayudar a abordar el cambio climático y otros problemas ambientales, puede resultar en una oposición política insuperable a la política.

Los incentivos fiscales para que los hogares adapten y mejoren sus propiedades también pueden ser efectivos para reducir los riesgos que enfrentan por los peligros naturales relacionados con el cambio climático y otros.

Seguros (Insurance)

Las personas, las empresas y los gobiernos pueden asegurarse contra pérdidas asociadas con el cambio climático y contra impactos y tensiones ambientales inevitables a través de empresas de seguros o autoasegurarse, reservando una proporción de sus ganancias para posibles eventualidades.

Integración

La integración puede lograrse promoviendo un desarrollo más compacto. Las autoridades deberían preocuparse de la provisión de tierra y viviendas asequibles en áreas más seguras con trabajos accesibles y servicios esenciales reduciendo la exposición al riesgo de las personas pobres.

Tales inversiones y medidas para reducir los riesgos podrían incluir el control de la erosión y la reforestación; muros de contención, sistemas de drenaje, diques, aliviaderos o embalses; o inversiones en zonas de amortiguamiento de inundaciones como humedales y áreas pantanosas.

Inversiones

Las inversiones en infraestructura pueden ayudar a la reducción de pérdidas humanas y económicas. Los sistemas de control de inundaciones, los refugios y la construcción de amortiguadores ambientales pueden integrarse a las inversiones en infraestructura.

trata de inversiones costosas pero duraderas pues una vez establecidas podrían durar por más de 150 años. Las inversiones pueden ayudar a las ciudades a anticipar los desafíos del crecimiento. Las inversiones no solamente son aquellas grises basadas en cemento, sino que también existen inversiones basadas en la naturaleza como la reforestación, para abordar los riesgos del cambio climático.

¿Quién toma las decisiones?

A pesar de la diversidad de casos posibles en los países, el reporte hace un esfuerzo por resumir a los posibles actores involucrados y sus decisiones. Sin embargo, una buena parte de la reflexión se concentra en los gobiernos locales. En este nivel, la posibilidad de acción de los gobiernos locales dependerá del alcance, entendido como las responsabilidades administrativas con las que cuentan los gobiernos locales, y la capacidad, medida por el número de empleados, capacidad de cobro de impuesto locales y productividad de los empleados públicos.

El enfoque propuesto involucra expandir el alcance y capacidades. La capacidad, en la que sí podría incidir directamente los gobiernos locales, podría ser expandida buscando apoyo técnico o construyendo asociaciones con municipalidades vecinas, el sector privado o la academia.

El reporte en este punto contiene un detalle de las posibles acciones tanto de los gobiernos nacionales como de los gobiernos locales en términos de definición de objetivos, planificación e implementación, financiamiento y construcción de capacidades. Esta guía es importante y deberá ser contrastada con la realidad, condiciones y competencias en cada país. Las organizaciones de la sociedad civil, en un sentido amplio, también están llamadas a contribuir con sus capacidades contra los efectos del cambio climático. 

¿Cómo tomar decisiones?

En esta sección, el reporte enfatiza en que se deberá considerar las diferencias contextuales de cada caso para tomar las decisiones adecuadas. En términos de decisiones de política, las ciudades podrían poner un énfasis más fuerte en ser más verdes, ser más resilientes o ser más inclusivas, probablemente considerando el análisis de los desafíos principales descritos en el capítulo 2.

Los últimos apartados están dedicados a describir una serie de precauciones a momento de definir las políticas como los co-beneficios o las compensaciones. En un sentido positivo, las inversiones en reducción del riesgo pueden mejorar el desarrollo económico de los sectores donde de realizan, mejorar las condiciones de vida y vivienda. Sin embargo, en ocasiones, las inversiones de adaptación energética podrían elevar los costos significativamente, excluyendo a la población pobre de acceder a vivienda y provocando exclusión.  

El reporte concluye con una tabla resumen de posibles políticas a medida de las ciudades en función de su tamaño y nivel de desarrollo, que representa una importante guía para los gobiernos de las ciudades.

Tabla 2. Alternativas de políticas a medida, por tipo de ciudad e instrumento

Fuente: Banco Mundial 2023

Tabla 2. Alternativas de políticas a medida, por tipo de ciudad e instrumento (cont.)

Fuente: Banco Mundial 2023

A manera de balance, podríamos mencionar que los conceptos abordados en este documento (ciudades verdes, resilientes e inclusivas) no son nuevos, pues desde diferentes perspectivas, varios autores desarrollaron términos y conceptos iguales o relacionados. La Red de Ciudades Biofílicas, por ejemplo, aborda actualmente la necesidad de desarrollar iniciativas que permitan a las ciudades “crear conexiones visuales y físicas con la naturaleza e incorporen materiales naturales, o aquellos que imitan a la naturaleza y las formas naturales” (Océane Bidault, 2017).  ONU Habitat (s/f), por otra parte, continúa trabajando de manera permanente sobre la resiliencia urbana, entendida como “la habilidad de cualquier sistema urbano de mantener continuidad después de impactos o de catástrofes mientras contribuye positivamente a la adaptación y la transformación”.

No siendo conceptos nuevos, sin embargo, el reporte destaca por su capacidad de síntesis, al advertir la necesidad de diagnosticar con base en un amplio estudio de ciudades, desarrollar variables de importancia relacionadas con la temática, hacer un estudio de casos y fundamentalmente, recomendar políticas en función de todo el bagaje alcanzado, tratando de llamar la atención de los líderes globales, nacionales y locales sobre un asunto de urgencia.

Referencias bibliográficas

Banco Mundial (2023). THRIVING: Making Cities Green, Resilient, and Inclusive in a Changing Climate. https://www.worldbank.org/en/publication/thriving?intcid=ecr_hp_headerG_en_ext

Océane Bidault (13 de abril de 2017). ¿Qué son las ciudades biofílicas? Water Logic. https://www.waterlogic.es/blog/que-son-las-ciudades-biofilicas/

ONU Habitat (s/f). Resiliencia Urbana. https://unhabitat.org/es/node/3774


[1] This is an adaptation of an original work by The World Bank. Views and opinions expressed in the adaptation are the sole responsibility of the author or authors of the adaptation and are not endorsed by The World Bank.

[2] Traducción propia

[3] La metodología clasifica a las ciudades según su nivel de ingreso promedio. Cuando se hace referencia al nivel de desarrollo, en el documento de origen y en este documento, se está haciendo referencia al nivel de ingreso de los países.

[4] El documento original se refiere al término “grenness” que en este documento se traduce como “vegetación” pues su alternativa “verdor” no es de uso común.

[5] El término “severity” es traducido en esta reseña como “gravedad”, aunque también podría ser entendido como severidad.

[6] Se tradujo el término “infill development”, como “desarrollo al interior” para evitar confusiones con otras traducciones como “desarrollo de relleno”.

Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad de los autores y no reflejan necesariamente una posición del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz.

¿Qué tan útil fue esta publicación?

¡Haz clic en una estrella para calificarla!

Puntuación media 0 / 5. Recuento de votos: 0

No hay votos hasta ahora! Sea el primero en calificar esta publicación.